Natalie Portman

 

Cuando la actriz israelí -originalmente llamada Neta-Lee Hershlag- debutó bajo la dirección del aclamado Luc Besson en la cinta The Professional en 1994; los pronósticos pudieron haber apuntado hacia un devenir similar al de otras estrellas infantiles como Macaulay Culkin o Lindsay Lohan: fiestas desenfrenadas, arrestos rutinarios y varias visitas a centros de rehabilitación.

No obstante, esta precoz y brillante joven optó por dirigir su carrera y vida personal de forma discreta y sensata, colocando sus intereses académicos por encima de la fama. Tal decisión la llevó a graduarse de la Universidad de Harvard en 2003 con un grado en psicología, publicar dos investigaciones en diarios científicos e impartir una clase magistral en la Universidad de Columbia para más tarde continuar con su trayectoria en el séptimo arte y coronarse como Mejor Actriz por Black Swan de Darren Aronofsky, durante la 83ª entrega de los Premios de la Academia.

Tras un merecido periodo sabático -en el que contrajo matrimonio con el coreógrafo francés Benjamin Millepied y tuvo a su primer hijo, Aleph-, Natalie volvió bajo los reflectores dirigiendo y protagonizando su ópera prima A Tale of Love and Darkness, estrenada en el Festival de Cannes. Además de ser la musa por excelencia de Dior, también es célebre por difundir el veganismo y la conservación del medio ambiente, así como por estar afiliada al Partido Demócrata y apoyar el matrimonio homosexual.

“Puede que otros discrepen conmigo con lo de que los animales tienes personalidad propia, pero la tortura, ampliamente documentada, que sufren es intolerable”, declaró la actriz. “Es una responsabilidad que compete a todo el mundo”.