Cerdos son modificados genéticamente para trasplantes de órganos 🐖💉

Por estos días se dio a conocer la noticia de un ciudadano estadounidense al que le fue trasplantado el corazón de un cerdo.

Este ‘histórico avance’ para la ciencia, catalogado como exitoso por los médicos, utiliza a los cerdos como piezas de repuesto, realizando experimentaciones e intervenciones en sus cuerpos y genes para lograr una cercana similitud a la de un humano y así evitar su rechazo. Lo anterior aun sabiendo que los órganos humanos siguen siendo la mejor posibilidad para estos procedimientos médicos.

Para lograr la cirugía, le realizaron diez modificaciones genéticas al cerdo: se eliminaron tres de sus genes para que el cuerpo humano no rechazara los órganos mediante anticuerpos. También se insertaron en el genoma seis genes humanos responsables de la aceptación inmunológica del corazón de cerdo. Por último, se eliminó un gen adicional en el cuadrúpedo  para evitar el crecimiento excesivo del tejido del corazón animal.

Este tipo de trasplantes de animales a personas no es nuevo, ya que se probó por primera vez en los años 80’, pero se abandonaron en gran medida después del famoso caso de Stephanie Fae Beauclair: se trata del caso de un bebé que nació con una grave dolencia cardiáca, el cual recibió en California un trasplante de corazón de simio y murió un mes después del procedimiento debido al rechazo del sistema inmunitario al corazón.

Varias empresas de biotecnología siguen desarrollando órganos de cerdo para trasplantarlos en humanos, dado que las válvulas de estos y las del animal son similares. El cerdo que se usó para la operación del viernes provino de Revivicor, una subsidiaria de la empresa estadounidense United Therapeutics.

Si bien a nivel mundial existe una gran escasez de donantes de órganos para trasplantes, lo que ha llevado a los científicos a investigar si se puede usar animales en su lugar, demuestra una vez más el egocentrismo del ser humano, anteponiendo sus deseos y necesidades por sobre los animales, usándolos a su antojo.