El sabor que elegí es naranja, queda increíble y lo que más me gusta es que utilicé toda la naranja y no desperdicié ningún pedacito. Ideal para acompañar el té o tus desayunos.
Ingredientes:
1 taza de aceite
2 tazas de azúcar orgánica integral
3 tazas de harina
1 naranja
Pizca de sal
2 cdas de polvo de hornear
Leche vegana C/N
Paso a paso:
Rallar la naranja y exprimir. Quitar las semillas (¡plantalas!) y cortar la cáscara en cubitos chicos. Hervir 5’ en agua y escurrir. Reservar.
En un bowl mezclar el aceite, azúcar, jugo de naranja, sal, ralladura. Emulsionar bien. Añadir de a poco la harina y los pedacitos de cáscara.
Incorporar el polvo de hornear y leche vegans si es necesario (depende de la jugosidad de la naranja). Tiene que quedar consistencia tipo bizcochuelo más firme. Volcar en un molde previamente aceitado y con azúcar para que no se pegue.
Cocinar en horno a 180º hasta que tome color. Tip: introducir un palillo y que salga húmedo y limpio.